viernes, 31 de agosto de 2012


PROYECTO DE CARTA A LOS MAGISTRADOS DEL TEPJF

Resulta impactante el cargo: "Magsitrado del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación". Todo un logro profesional, sin duda. Sin embargo, ha quedado fehacientemente demostrado por ustedes mismos, que el cargo y el nombre les viene grande, es más, son indignos de ellos.

Me importa un bledo el motivo, moral o inmoral, por el cual ustedes alcanzaron tal nombramiento, porque eso no importa, en el fondo lo importante es saber quiénes son y el pueblo ya lo sabe, y quien no lo sabe lo sabrá muy pronto.

Ustedes son de la clase donde los intereses y las relaciones políticas con el poder están por encima, pero muy por encima de la Ley, de la moral, de la Patria y de las necesidades del pueblo mismo. Ustedes están a la par de aquellos diputados que en 1910 rechazaron con la mano en la cintura los legítimos reclamos del pueblo después de haber sido burlada su voluntad en la urnas. Pero hoy no sólo, como dicen ustedes, se trata de número de votos, sino de la calidad de una elección, porque de la calidad, se desprende sin duda alguna, la cantidad. Cosa que ustedes niegan porque como dije antes, son serviles a las relaciones de poder.

Su trabajo, si puede llamarse así, ha sido no con la intención y la voluntad de encontrar la verdad, sino por el contrario, de taparla, negarla, derrumbar una a una o en grupo, todas las posibles pistas que condujeran a descubrir esa verdad, misma que en sus manos estaba hallar para entregarla al pueblo de México. Pero no, abusaron de su posición para burocratizar el proceso enrollándolo en supuestas pesquisas (casi podría asegurar que con la consigna de que si una pesquisa pudiera conducir a un hallazgo importante, se cancele); dolosamente fueron negligentes y dolosamente fueron omisos.

Después, se dedicaron a preparar, tal como si se tratase de un escudo, una retahíla verborréica a la cual intentaron dar facha de discurso patriótico, de solemne encuentro con la verdad. Pero ni fue discurso ni fue patriótico, ni solemne ni verídico, sino amasijo de demagogia tan pero tan burdo, que cualquiera con un mínimo conocimiento del Derecho Constitucional, pudo percatarse del engaño y de la trampa.

No voy a continuar indicándoles qué hicieron y cómo lo hicieron, porque eso ustedes lo saben perfectamente bien dentro de su círculo de complicidades, con acuerdos inmorales. Voy a decirles en cambio, la razón por la cual lo hicieron. Aunque más que decírselos a ustedes, se lo digo al pueblo, para que lo sepa.

Este país está corrompido por un cáncer político económico llamado PRIAN. Quien no está con ellos, está contra ellos y puede olvidarse de escalar posiciones -si es político su interés; y olvidarse de participar en jugozos negocios -si su interés es económico. Aunque en realidad, todos los leales a este cáncer van por ámbas cosas, beneficio político y beneficio económico, pero se desenvuelven a ojos de la población, dentro del ámbito económico o dentro del político, o en casos concretos dentro de ambos. Es tal el poder y la penetración de este cáncer, que tiene corrompidas a todas las instituciones en sus mandos superiores, a todos los sectores en sus liderazgos y a todos los órganos de gobierno en sus administradores. En fin, 
se trata de una METÁSTASIS, donde los fieles, tanto operativos como planificadores, son leales a las directrices que marca la enfermedad. Y ustedes forman parte de la enfermedad, y son tan leales a ella, que si les pidieran vender a su madre, la venden. Lástima que eso no va a pasar porque sus madres ya sirvieron al propósito y no sirven para más nada (el propósito fue parir canallas -ustedes- para engrosar las filas de la alta delincuencia organizada que controla este país).

Debajo de ustedes, se hallan toda suerte de especímenes, digamos como bacterias, que se alimentan del cáncer, pero no lo destruyen, sino lo fortalecen. Son todos los que por conveniencia (igual, política, aunque más económica) se alimentan y engordan a la sombra del poder, a través del compadrazgo, el amiguismo, el nepotismo, etc. Son los consentidos del Sistema, los hijos predilectos que a la larga, pueden aspirar en futuras generaciones a convertirse en parte integral de la metástasis. Son tales las prebendas y beneficios que se les otorga desde el poder, que inclusive ha atraído a sus correspondientes extranjeros para hacer una verdadera bacanal con los recursos del país, que en sentido estricto, pertenecen al pueblo.

Luego están las fuerzas oscuras: los narcotraficantes, secuestradores, violadores, asesinos. Todos los cuales se encargan, a cambio de vía libre para enriquecerse, de proteger el cáncer por medio de mantener a la población con miedo, aislada y sometida a un mínimo de socialización.

Todo este mosaico es al que pertenecen. Ustedes son apátridas porque el concepto de Patria no cabe en sus intereses: se trata de una palabra que utilizan para engañar, porque saben que para el pueblo sí tiene un alto significado, pero que para ustedes, no significa nada. Lo mismo pasa con tantos y tantos conceptos como "mexicano", "ciudadano", "honorable", etc. Esa falta de identidad con tales conceptos, es la razón por la cual no les molesta que alguien les reproche al respecto. Y digo que no les molesta aunque tengan que aparentar que sí les molesta.

CONTINUARÁ....

No hay comentarios:

Publicar un comentario