LOS
AMOS DEL MUNDO
LOS
AMOS DEL MUNDO
Por: Jennifer López
Introducción
Desde que los trabajos del primer tomo de “El Sistema del
Poder”, me condujeron necesariamente a considerar una entidad mayúscula dentro
de las estructuras del poder mundial, tanto por la parte lógica del desarrollo
socio político de las naciones, como por la parte del devenir económico, sobre
todo de las condiciones que se gestaron unos años antes de la Revolución
Industrial, y que se afianzaron de manera superlativa a partir de la producción
en masa generándose así lo que posteriormente se conoció como sociedad de
consumo, fue que sin mucho afán, encontré pruebas más que contundentes
de la existencia de esa entidad mayúscula, pero no como inicialmente la había
concebido, que era de modo un tanto casuístico, donde las herencias económicas
y de poder se comportan de acuerdo a los vaivenes de la historia, haciendo
cambiar de manos el poder de acuerdo a grupos que aparecían antagónicos, sino
que la hallé como una maquinaria capaz de someter a sus designios a
cualesquiera de los grupos que se hacían con el poder, independientemente que
fueran antagónicos unos con otros. Es decir, la entidad (que en el caso de “El
Sistema del Poder” había denominado como “El Gran Clan Mundial” o GCM), resultó
ser de una potencia tal, que su viabilidad no responde a los vaivenes de la
historia, sino que es la entidad, quien acompasa el ritmo, por lo que desde su
conformación y hasta el día de hoy, se mantiene inmune a toda consideración
histórica.
Tal vez resulte increíble leer que un grupo de gentes a
los largo de al menos 7 generaciones, ha sido capaz de obtener tal poder, que
controla a voluntad todo lo que ocurre ante nuestros ojos desde el punto de
vista socio político, donde lo económico es la fuente de ese poder y se llega a
manifestar inclusive, en lo militar. Decir que después de las guerras
napoleónicas, el 80% de las subsecuentes han sido provocadas, propiciadas o al
menos financiadas por ese grupo, suena a paranoia de conspiración. La mejor
defensa del diablo, es que no crean en él.
Sin embargo, siguiendo una línea de pensamiento lógico,
misma que me permitió descubrir a este grupo durante mi anterior trabajo sin
siquiera tener información del mismo, y que después ante la evidencia racional
y bibliográfica, iniciada su búsqueda no tardé en encontrarlo, y al encontrarlo
y estudiarlo, puedo afirmar categóricamente que la realidad, ha superado a la
lógica y a la ficción juntas.
En un sistema basado en
el comercio, donde las leyes se hacen para proteger a quien ostenta poder y
riqueza, y donde quien más tiene en el instante A, tenga mayor probabilidad de
tener aún más en el instante B posterior, que uno que no tiene o que tiene
poco, no resulta extraño ni fantasioso, que a lo largo de los años, la
acumulación adquiera tintes de crecimiento exponencial llegando a niveles
insospechados. Siguiendo esta lógica y si se dan los sucesos propicios, un solo
grupo puede llegar a ser un cónclave de poder económico tal, que todos los
demás grandes poderosos no tengan más alternativa que ponerse a su servicio
para conservar lo propio. Esos otros poderosos sumisos, se conforman por
grandes empresarios e inversionistas, grandes industrias como tal, e inclusive,
gobernadores de todos los pueblos del mundo, lo que da como resultado, que los
Estados que ellos dirigen, los pongan al servicio del GCM. Esta última teoría
resulta aún más increíble y, sin embargo, es comprobable en grado sumo.
No resulta pues difícil
comprobar teórica y lógicamente, la existencia de un grupo capaz de controlar
al mundo, dadas las características de este Sistema (ya tratado en “El Sistema
del Poder”). Lo difícil es comprobarlo físicamente; razón, motivo y objetivo de
este trabajo.
Imaginemos un mundo
cubierto de islas, cada una con una organización social piramidal y con su Rey.
Para que el Rey se mantenga en el poder, requiere un manejo de la economía tal,
que además de permitirle disfrutar de una vida holgada y placentera, se den las
condiciones para que el pueblo tenga lo mínimo indispensable. Si la base de la
economía de las islas es la producción de cocos, quien controle las palmeras,
controla los cocos, y quien controle los cocos, controla la economía, y quien
controla la economía, gobierna, y quien gobierna, quiere mantenerse gobernando.
Si por azares del destino, el Rey pierde el control de las palmeras, otro le
quitará el cargo y el poder. Pero resulta que a ese otro no le interesa ser
Rey, pero sí el poder. Entonces resuelve que será el Amo del Rey, pero desde
las sombras. Si ese azar del destino incluía a dos de las islas principales por
su poder y riqueza, entonces ese otro que se hizo del control de las palmeras
en esos reinos, en relativamente poco tiempo podrá apoderarse también del
control de las palmeras de más y más islas hasta controlar el mundo. Por eso no
quería ser Rey, para no estar expuesto a la historia y para poder gobernar sin
temor más de un reino o dos, sin ser señalado, sin necesidad de homologar sus
dominios, sin estar expuesto a los riesgos de gobernar abiertamente, sin que
los pueblos sepan que está ahí, sin exponerse a la democracia, ni al consenso
ni al disenso; ni a la Ley ni a norma alguna.
Bueno pues esas islas,
representan a dos naciones: Inglaterra y Francia en la época de las guerras
napoleónicas. El azar del destino es la persecución que Napoleón hizo sobre el
Príncipe Guillermo IX de Hesse-Hanau, de la casa Hesse-Kassel (la más rica de
Europa), por motivo de haber sido parte del complot que lo había exiliado. El
Príncipe se había hecho muy rico con el comercio de esclavos negros a América y
con el alquiler de soldados a países extranjeros, y en su huída, dejó una buena
parte de su fortuna (unos 500,000 francos o 3,000,000 de dólares, según
diversas fuentes) en resguardo a unos cambistas, quienes especularon con ese
dinero y ganaron el 2500% gracias a información privilegiada sobre la guerra de
Waterloo (aunque devolvieron el dinero al Príncipe con su respectivo 8%
pactado). Los cambistas entonces tomaron el control de la economía de
Inglaterra al apoderarse financieramente del Banco Central (que vienen siendo
las palmeras). Los cocos, son el oro del mundo. Los cambistas con el tiempo, se
erigieron como los principales manufactureros de monedas de muchos países,
principalmente en Europa, a través del control de sus Bancos centrales. A finales
del siglo XIX, los cambistas poseían el 50% de los recursos financieros del
mundo. El nombre de estos cambistas, es Rothschild. Los datos son reales
y comprobables, pero de esta historia y de cómo sucedieron las cosas,
hablaremos en detalle en la parte medular de este trabajo.
Pero no solo se trata de exponer la investigación sobre
los siglos anteriores, sino aportar datos lo más actuales posibles y
compaginarlos con lo analizado en El Sistema del Poder, y más aún,
buscar las relaciones existentes entre los diversos grupos de poder, tanto
laico como religioso.
Antes de dar comienzo a esta exposición, debo decir que no
se trata de mera especulación, sino que básicamente se trata de datos
bibliográficos y hemerográficos cuyas referencias se encuentran al final de la
obra, aparte de los pies de página. A la par de estas referencias, se
establecen algunos supuestos lógicos que pueden considerarse como especulación,
pero aún así, resisten cualquier prueba histórica. Es conociendo las relaciones
entre los hechos históricos y la realidad que de ellos se derivó, que los datos
resultan por demás convincentes, a tal grado, que al analizar la historia
contada en las escuelas a la luz de estos datos, aparece más inverosímil que de
costumbre, con sus héroes y villanos, donde se dan a conocer los hechos más o
menos reales, pero rara vez se tocan aspectos que no estén inscritos en una
concepción hermética del “Bien y del Mal”, de metas patrióticas, de ambiciones
que al buen entendedor le resultan irracionales. Por ejemplo, para los crímenes
de Stalin en la posguerra (más de un millón de muertos), la historia oficial no
hace más que responder con diversos denominativos, como el de asesino,
xenófobo, loco, etc., pero no explica (porque ni siquiera intenta penetrar) los
motivos detrás de tales actos. O en el caso de los 6 millones de judíos
asesinados por los nazis ¿se tiene idea del espacio necesario para albergar a
un millón de gentes, con áreas de trabajo, dormitorios, comedores, celdas,
oficinas administrativas, cantidad de guardias, almacenes de alimentos, etc.,
así como, de acuerdo a las investigaciones, en cuánto tiempo se puede aniquilar
con gas a un millón de gentes si en cada lote entran de 60 a 80, y tarda más de
dos horas cada lote, entre que se reúnen, se introducen, se gasean, se sacan y
se deshacen de los cadáveres? ¡Necesitaría más de 2 mil días operando 12 horas
al día para gasear a un millón de gentes! Es decir, alrededor de 5 años.
Ahora bien ¿es acaso que la historia miente? En todos los
hechos históricos siempre encontramos incongruencias y esto se ha hecho una
cosa normal. La explicación va más allá del término “historia oficial”, que si
bien se entiende como una manera de manosear los datos para beneplácito de los
gobernantes y de esa manera se acepta, la verdadera razón de la tergiversación
de la historia la encontrará aquí, en esta obra, o al menos comprenderá que la
historia moderna no la hace solo el historiador, sino que es éste quien trata
de darles sustento y lógica a los datos que recibe del periodista, quien es el
que verdaderamente escribe la historia del día a día en la actualidad. Si
sabemos que el 90% de los periodistas están bajo control, ya sea por pertenecer
a una línea de pensamiento o de intereses definidos, ya sea porque más que
periodismo hace las veces de un simple recolector de noticias desde las grandes
agencias internacionales, todas controladas y todas manipuladas, entonces la
conclusión es muy simple: la historia actual no es el reflejo vivo de la
realidad, sino el sueño ficticio de quienes controlan los medios de
comunicación.
Como vimos en uno de mis libros anteriores (El Ser
Antisistémico), el gran educador de nuestro tiempo es el televisor, y si como
ahí se ha dicho también, los dueños de los medios de comunicación son parte del
GCM, entonces ¿por qué seguimos siendo fieles creyentes de los medios? Y por
otro lado, ¿por qué nos cuesta tanto creer lo que no se publica en esos medios?
Buscar, encontrar, analizar, organizar, sintetizar y comprobar en lo posible
información fuera del control oficial, son tareas por demás abrumadoras, pero
de cierto posibles gracias a que no todo está filtrado, no todo está bajo
control total, y merece la pena leerlo. He aquí, el resultado de muchos años de
esfuerzo en este sentido.
Pero ya no son sólo la televisión, la radio, los diarios,
los libros y demás medios de comunicación masiva se utilizan para el control de
la población, ya sea, como hace unas décadas, para conservar el stablishment,
ya sea como ahora que fungen como promotores de nuevas formas culturales. El
explosivo crecimiento de la Internet, ha abierto nuevos horizontes en este
sentido, aunque es precisamente su velocidad de crecimiento, lo que ha
permitido nichos donde el control de la información no ha llegado al nivel
deseado por el GCM, aunque tarde o temprano logrará someterlo a su
jurisdicción, sin importar resistencia alguna, porque como vimos en “El Sistema
del Poder”, la falta de conciencia de la población y la ignorancia, son la
garantía para lograrlo.
I. Los orígenes
Aunque la conformación del GCM se remonta a finales del
siglo XVIII, los orígenes históricos que lo propiciaron son mucho más antiguos.
Específicamente vamos a remontarnos a la época de la Diáspora israelí.
Por razones prácticas, seré breve en esta parte histórica.
Si se quiere ahondar en ella, existe mucha información muy accesible al
respecto. Bien, cuando los romanos destruyen Jerusalén en el año 70 D.C., se
inicia el desmantelamiento del Templo de Salomón, lugar donde se hallaban los
libros sagrados judíos. En la confusión, un sacerdote levita toma los
pergaminos y se esconde entre los escombros. Tiempo después logra salir de la
ciudad y saca los textos sagrados en un sarcófago. Fueron pocos los judíos
(esenios y fariseos) los que lograron salvar parte de su acervo bibliográfico
de modo que en los diversos lugares a donde llegaban, no contaban con todo el
compendio de literatura religiosa o de plano ni siquiera un rollo. Esta
situación puso en riesgo la tradición judía que en muchos casos ahora sólo
dependía de la trasmisión oral de sus registros históricos. Sin embargo, lo que
salió, permitió la expansión del judaísmo, aunque su fortalecimiento fuera de
Palestina, tardó siglos.
Un grupo de sacerdotes judíos llegó a Alejandría, en
Egipto. En ese tiempo, en Palestina había tres corrientes de pensamiento
religioso bien definidas: los saduceos, los fariseos y los esenios. Una de
ellas, al parecer esenios (los saduceos fueron destruidos por los romanos con
todo y su acervo bibliográfico, y los fariseos eran demasiado legalistas),
empezaron a conformar una nueva religión en Alejandría, que se denominó
Gnosticismo (evolución del Kabbalismo), a partir de un sincretismo entre
judaísmo, cristianismo y las religiones paganas prevalecientes en ese tiempo y
lugar (principalmente la griega y la egipcia, pero teniendo como base al
cristianismo). Esta corriente religiosa, pronto salió de Egipto hacia Palestina
y Turquía, donde encontró acogida por los herederos de los antiguos esenios. Ya
en la Era del catolicismo, los gnósticos fueron rechazados, perseguidos y su
teología declarada anatema por la Iglesia Ortodoxa, pero el movimiento continuó
clandestinamente, en las sombras, como sociedad secreta. Sus métodos,
protocolos y formas de trabajar que se desarrollaron bajo tal persecución, no
distaban mucho de lo que en un momento dado fue conocido como masonería.
La masonería llegó a aglomerar a diversos personajes
importantes de la historia europea de la Edad Media, entre ellos, a muchos
católicos. Esto tuvo mayor resonancia a finales de la última cruzada, cuando
los Templarios, regresan a Europa expulsados por los sarracenos al mando de
Saladino, y se instalan predominantemente en Francia, Alemania y Escocia
trayendo consigo a un grupo de arquitectos palestinos, ya que éstos eran muy
apreciados por ser quienes diseñaban y construían los templos de los cruzados
en Tierra Santa, construcciones mucho más armoniosas y llenas de detalle que
contrastaban con la arquitectura Europea de esos tiempos. Los Templarios,
utilizaron parte de su riqueza traída de Tierra Santa e hicieron que sus
arquitectos palestinos y turcos construyeran sus castillos, sus templos y sus
palacios en Europa. Algunos de estos arquitectos palestinos, eran gnósticos (o
masones, aunque aún no se acuñaba el término) y habían influido sobre los
generales templarios. Fue cuando la persecución que Felipe “el hermoso”, Rey de
Francia hizo a los templarios (orden que fue disuelta por el Papa Clemente en
Viena en 1307), que éstos huyeron a Escocia, donde no llegaba la mano del Rey y
se refugiaron en los hogares de sus correligionarios escoceses. En Escocia,
lejos del poder monárquico de Europa continental y de la persecución de la
Iglesia Católica, la masonería templaria encontró tierra fértil para
fortalecerse y con el tiempo, inundar el resto de Europa. La masonería penetró
en todos los niveles de la sociedad europea y se dividió en diversos ritos y
corrientes, conservando su característica de sociedad secreta. Una de ellas, la
más radical, la Francmasonería, aglomeró a personajes igualmente radicales,
como es el caso del fraile Ignacio de Loyola (1),
quien a la postre fundaría la Orden de los Jesuitas.
Napoleón Bonaparte hizo esta afirmación: "Los
Jesuitas son una organización militar, no una orden religiosa. Su jefe es un
general de un ejército, no un mero padre abad de un monasterio. Y la meta de
esta organización es: PODER. Poder en su ejercicio más déspota. Poder
absoluto, poder universal, poder para controlar al mundo por la volición de un
solo hombre. El Jesuitismo es el más absoluto de los despotismos; y al mismo
tiempo el más grande y más enorme de los abusos…”
En
las logias masónicas de Escocia, se identifica una, con miembros de alto rango,
como la logia de los Caballeros Templarios de Salomón (he aquí la influencia
judía en la masonería europea).
Las logias escocesas, influyen en Londres a través de la
dinastía de los Estuardo (2). En la
actualidad, la logia templaria, agrupa a más de 400,000 miembros y representa
al 2% de la Gran Logia de Londres.
A
continuación, un cuadro donde se pueden observar algunas relaciones entre
distintas sociedades secretas:
En
el siglo XVIII, la francmasonería florece en Europa, principalmente en
Inglaterra, Francia y Alemania, donde atrajo también, a muchos judíos europeos,
principalmente asquenazí ó ashkenaí. El término asquenazí, se refiere a los judíos
europeos que no necesariamente tienen su origen en la Diáspora, sino a una
migración desde un territorio, judío por decreto, llamado Khazaria.
Khazaria, era un reino ubicado a unas 800 millas al norte
de lo que hoy es Georgia, entre el mar Negro y el mar Caspio y cuyo dominio
hacia el norte llegaba hasta lo que hoy es la ciudad de Kiev. Su condición de
nación dedicada al comercio y a la renta de mercenarios, la hizo una tierra muy
próspera, aunque curiosamente, su historia y su influencia en ella, ha sido
borrada de los libros por alguna razón que desconozco. Lo que se puede
encontrar de Khazaria, es que llegó a ser muy poderosa y con una gran variedad
étnica por lo que se permitía la libertad de culto. Uno de sus reyes, sin
embargo, consideró que la diversidad religiosa iba en contra de la unidad de su
reino ante la presión oriental del Islamismo y la presión occidental del
catolicismo, por lo que mandó una carta al Califa para que le instruyera acerca
de la conversión al Islam. El Califa le hizo ver que sería un gran placer
expandir sus dominios político religiosos, ya que todo musulmán, se debe al
Califa. El Rey de Khazaria mando la misma carta al Papa y el Papa le respondió
en el mismo tono que el Califa. Al final, el Rey de Khazaria resolvió no instaurar
el Islamismo para no someterse al Califa, y tampoco instaurar el catolicismo
para no someterse al Papa. Un consejero judío le sugirió entonces al Rey,
inclinarse por el judaísmo, pues ante la inexistencia de un Estado judío y la
ausencia de un líder judío al cual someterse, el reino de Khazaria sería
soberano en sí mismo. El Rey Bulán resolvió entonces decretar el judaísmo como
la religión oficial de su reino en el año 740. Luego, cuando Khazaria fue
invadida y el reino deshecho, muchos “judíos por decreto” emigraron a Europa
donde se les conoció como asquenazí, aunque ellos sostienen que son judíos
auténticos.
De acuerdo con el escritor Arthur Koestler en su libro
The Thirteenth Tribe / The Khazar Empire and its Heritage, el reino de Khazaria
era el país más grande en toda Europa -- tan grande y tan poderoso que cuando
otros monarcas deseaban ir a la guerra, los Khazares (o Jázaros) le podían
rentar hasta 40,000 soldados. Con ello
se puede ver cuan grandes y poderosos eran.
Según Koestler : “Ellos eran
adoradores fálicos. Esa era su religión, como también era la religión de muchos
otros paganos y bárbaros en otras partes del mundo. En el siglo VII, el rey
Bulan de Khazaria estaba tan hastiado de la degeneración de su reino que él
decidió adoptar una de las llamadas fe monoteísta --ya fuese el Cristianismo o
el Islam, o lo que es hoy conocido como Judaísmo, que en realidad es
Talmudismo. Haciendo girar un trompo y convocando el "eeny, el meeny, el
miney, el moe", él escogió el llamado Judaísmo (Talmudismo) [Año 740 DC].
Y ésa se transformó en la religión estatal. Él envió a su gente a las escuelas
talmúdicas de Pumbedita y Sura y educó a miles de rabinos y abrió sinagogas y
escuelas, su pueblo se transformó en lo que nosotros llamamos
"judíos”."
“Ninguno de ellos tenía tan
siquiera un antepasado que hubiese puesto el dedo de un pie en Tierra Santa. No
sólo en la historia del Antiguo Testamento, sino desde el principio de los
tiempos. ¡Ninguno de ellos! Y aún así
ellos vienen a los Cristianos y piden que apoyemos sus insurrecciones armadas
en Palestina diciendo, "Usted quiere ayudar a repatriar al Pueblo Elegido
de Dios a su Tierra Prometida, su hogar ancestral,
¿Quiere usted hacerlo? Es su deber cristiano. Nosotros le entregamos uno de
nuestros hijos como su Señor y Salvador. Usted va ahora a la iglesia los
domingos y se arrodilla, le rinde culto a un judío y nosotros somos los
judíos."
“Pero ellos son paganos
Khazares que se convirtieron, tal como fueron convertidos deportó a Tierra
Santa, una nueva cosecha de habitantes. Ellos no se transformaron en personas
diferentes. Ellos eran las mismas personas, pero habían aceptado el
Cristianismo como fe religiosa.”
“Estos Khazares, estos
paganos, estos asiáticos, estos Turco-Finlandeses eran una raza Mongoloide que
fue expulsada de Asia a Europa oriental.”
“Porque su rey adoptó la fe
Talmúdica, no tuvieron otra elección sobre la materia.”
Como una de las autoridades
principales acerca de los Khazares, el profesor Peter Golden de la Universidad
de Rutgers, escribió en su libro Khazar Studies: “Los Khazares jugaron un papel
central en las más importantes guerras de la región del Caucaso. Primero, a
principios del siglo VII, se unieron con turcos y bizantinos para derrotar al
estado Persa. Entonces, en los siglos VII y VIII, defendieron la frontera del
sudeste de Europa de la invasión árabe, permitiendo indirectamente a la
cristiandad sobrevivir en Bizancio y subsecuentemente crecer en Ucrania.”
“A cada escolar en el mundo
occidental se le ha dicho que sino fuera por Carlos Martel y su victoria en la
batalla de Poitiers, hubiera podido encontrarse ahora una mezquita en el lugar
en que está erigida actualmente la catedral de Notre Dame. De lo que pocos
escolares son conscientes es que si no fuera por los Khazares... Europa
Oriental bien podría haberse convertido en una provincia del Islam".
Su influencia era tan grande
que un emperador Bizantino del siglo X, Constantino Porfirogenitus, envió una
correspondencia a los Khazares marcado con un sello de oro que valía 3 solidi -
más de los 2 solidi que siempre acompañaron las cartas enviadas al Papa de
Roma, al Príncipe de Rus, y al Príncipe de los húngaros.
En
el siglo XI, el reino fue presa de diversas invasiones: ataques por parte de
los árabes, luego los rusos-eslavos y húngaros y finalmente Genghis Khan en el
siglo XIII hasta
su desintegración total. Grandes contingentes de judíos Khazares emigraron
entonces a Europa occidental. Es por todas estas razones, que los judíos
Europeos son antropológicamente más parecidos a los propios europeos que a los
palestinos, quienes son los verdaderos descendientes del pueblo de Israel, es
decir, lo que quedó del pueblo judío, los descendientes del éxodo israelí desde
Egipto, aquellos que conquistaron Jerusalén, Judea y Galilea, el auténtico
pueblo judío que gobernó el Rey David y que dio tantos profetas, no son los
ancestros de los judíos ashkenaí, como sí lo son de los actuales palestinos.
El
historiador israelí Shlomo Sand cuestiona varios de los mitos oficiales del
sionismo en su libro “Cuándo y cómo se inventó el pueblo judío”. El libro
contiene dos tesis que en el pasado tuvieron cierto predicamento, también entre
historiadores sionistas, pero que hoy han sido archivadas: que los actuales
judíos provienen de pueblos paganos que se convirtieron al judaísmo lejos de
Palestina, y por lo tanto no descienden de los antiguos judíos, y que los
palestinos árabes son los únicos descendientes de los antiguos judíos. Dice en
su libro: “Pongamos por ejemplo el supuesto exilio judío. El exilio nunca
existió. Cuando los romanos destruyeron el Templo en el año 70 de la era
cristiana, no expulsaron a los judíos por la fuerza. Los romanos nunca
exiliaron a pueblos, algo que sí hicieron los asirios y los babilonios con
algunas elites... Es cierto que los romanos no permitieron a los judíos que
vivieran en Jerusalén, pero los cristianos crearon la fantasía de que no se les
permitió vivir en toda Judea... Nunca hubo exilio. No hay ningún libro
científico que lo diga... Antes de Jesucristo había en Palestina entre medio
millón y un millón de judíos. La inmensa mayoría, un noventa por ciento, o quizás
un noventa y cinco por ciento, eran campesinos. Los judíos no eran como los
fenicios o los griegos, no viajaban tanto como ellos por el mar. La proporción
de los que salieron es infinitamente muy pequeña... la inmensa mayoría no
venían de Palestina. Eran conversos. Desde la época de Adriano, en el siglo II,
se experimentó una caída drástica del número de judíos porque muchos se
convirtieron al cristianismo. De cuatro millones de creyentes judíos se bajó a
un millón... Con los jázaros ocurre exactamente lo mismo: es el judaísmo, y no
los judíos, el que se expande. La masa demográfica más numerosa es la de los
jázaros. Es curioso que el sionismo reconoce la importancia de los jázaros
hasta 1967, y después deja de ser una tesis legítima... Los mongoles expulsaron
a los jázaros hacia Europa. No puede ser que los judíos de Polonia vengan de
Alemania, porque en Alemania, en los siglos XII y XIII, apenas había unos
cientos de judíos, y de ahí no se puede pasar de la noche a la mañana a tres
millones de judíos en Polonia, es sencillamente imposible. Los judíos de
Polonia, y de otros países de Europa oriental, sólo pueden venir de los
jázaros. Todavía en 1961 hay un prestigioso historiador israelí que afirma que
los jázaros son los antepasados de los judíos de Europa oriental. Entonces aún
se aceptaba que no provenían de Alemania... Hay muchos historiadores israelíes,
incluidos Yitzhak ben Zvi, el segundo presidente de Israel, o David ben Gurion,
que hasta 1929 afirman que los palestinos árabes son los verdaderos descendientes
de los judíos. Esta tesis que sostuvieron los mayores sionistas se murió en
1929. Todavía en 1918 Ben Zvi y Ben Gurion escribieron juntos un libro donde se
afirma que los palestinos son los auténticos descendientes de los judíos.”
Los
jázaros pues, son los que hoy se dicen judíos en Europa. Un descendiente de
estos judíos por decreto fue Moses N., quien engendró a Gumprecht, quien tuvo a
Naphtali Hirsch, padre de Lob, padre de Moses, padre de Amschel Moses zur
Hinterpfann (Moisés Amschel Bauer), prestamista y orfebre, que abrió una
contaduría en Francfort Alemania, junto con dos de sus hermanos, en 1750. Para
los judíos ashkenaí, era propicio desde hacía tiempo dedicarse a la usura ya que en Europa,
desde 1311 el Papa Clemente V había prohibido a los católicos prestar dinero
con intereses, pero los no católicos, podían hacerlo sin restricción. Se sabe
que de esta restricción papal, es que los judíos ashkenaí se convirtieron
muchos de ellos en prestamistas y banqueros, como fue el caso de Moisés Amschel
Bauer, quien coloca encima de la entrada de su contaduría, un escudo rojo en
forma de hexagrama (roth schild; el rojo era el pabellón de los judíos
protestantes de Europa del este). Mayer Amschel Bauer, fue hijo de Moisés
Amschel Bauer; él nace en 1744 y poco después de la muerte de su padre
(Moisés), regresa de trabajar como ayudante en la casa bancaria Openheimer en
Hanover, donde en poco tiempo se había hecho socio "junior" y conoce
al General von Estorff, de quien se hace socio y amigo. Cuando Mayer Amschel
regresa a Fráncfort a tomar el antiguo negocio de su padre, cambia su apellido
de Bauer a Rothschild (seguramente inspirado por el escudo rojo).
En 1760 el General von Estorff, lo recomienda en la corte
de Hanau y Mayer empieza a hacer negocios ahí, hasta que en 1769 consigue la
placa con el escudo de armas de Hessen-Hanau y la inscripción “M.A.
Rothschild, proveedor de la corte de su ilustre alteza, el príncipe Guillermo
de Hessen, Conde de Hanau”. Un año después se casa con Gutele Schnaper, hija
de Lobo Salomon Schnaper, un respetado comerciante ashkenaí.
En Alemania, la mayoría de judíos “convertidos” o judíos asquenazí, originarios de Khazaria, son masones. Entre ellos destaca Adam Weishaupt (3), francmasón que también pertenecía a la Orden de los jesuitas, quien forma la organización secreta de los Illuminati de Baviera en 1776. Otro judío asquenazí lo financia: Mayer Amschel Bauer (patriarca de los Rothschild). Por lo pronto vamos a dejar el tema de los Illuminati para más adelante y seguiremos con la historia de los Rothschild.
Símbolo Illuminati acuñado en 1776
Del matrimonio entre los Rothschild y los Schnaper, nacieron 10 hijos: 5 mujeres y 5 hombres (algún autor teologiíta los menciona como los diez cuernos de la bestia del Apocalipsis, siendo sus siete cabezas representadas por los siete patriarcas que ha habido en esa familia desde 1776 hasta el día de hoy). Esta familia ha crecido una enormidad (sólo contando a los hijos reconocidos). Astor, Bundy, Collins, duPont, Kennedy, Morgan, Oppenheimer, Rockefeller, Hitler, Sassoon, Schiff, Taft y Van Duyn, son apellidos donde el linaje Rothschild se extiende, además de varias familias reales de Europa. También es sabido que ellos, han cambiado sus nombres en los países donde viven para obtener posiciones influyentes dentro de ellos, y explotar dichas posiciones en beneficio de sus familiares del exterior.
Las
mujeres fueron: Schönche Jeannette Rothschild (1771) cónyuge Benedikt Moses
Worms (1772); Isabella Rothschild (1781), Babette Rothschild (1784), Julie
Rothschild (1790), Henriette ("Jette") (1791) cónyuge Abraham
Montefiore (1788). Sin embargo, dada la poca información accesible sobre los
cónyuges y los hijos de las mujeres, nos concentraremos en la descendencia de
los varones. El mayor de ellos, se llamó Amschel Mayer Rothschild Schnaper
(1773), le siguió Salomón Mayer (1774), luego Nathan Mayer (1777), le sigue
Kalmann o Carl Mayer (1778), y finalmente Jakob o James (1792). Hubo un sexto
hijo varón del cual se sabe poco, nacido fuera del matrimonio y que fungió como
infiltrado en el gobierno de Londres al servicio de su verdadera familia.
En
esos años, los Rothschilds se contaban entre los cambistas más reconocidos de
Europa y eran considerados como expertos inversionistas en las diversas bolsas
de valores del mundo. Este reconocimiento ignoraba en parte que mucho de su
éxito dentro de las finanzas especulativas, se debía a que habían montado una
red clandestina de espionaje que les proveía de información privilegiada,
rápida y precisa basada en sobornos, chantajes y amenazas. Es sabido que el
príncipe de Thurn und Taxis quién tenía el monopolio sobre el correo, fue
sobornado por Rothschild, como muchos otros, y le informó del contenido de
cartas importantes. El acceso de los Rothschilds a personajes clave de la
economía, se debía en buena medida a su relación como “socios” del Príncipe Guillermo
y a las actividades secretas de la organización Illuminati presidida por Adam
Weishaupt, además de sus agentes jesuitas. Weishaupt se había infiltrado en la
Orden Continental de Francmasones con la doctrina Illuminati y establece así
los alojamientos del Magnífico Oriente para ser su oficina central secreta.
Esto era todo bajo las órdenes y las finanzas de Mayer Amschel Rothschild y el
concepto se ha extendido y es seguido dentro de Alojamientos Masónicos por todo
el mundo hasta el día presente.
Weishaupt también recluta a 2,000 seguidores pagados incluyendo a los
hombres más inteligentes en el campo de artes, educación, ciencia, finanzas, y
la industria. Ellos fueron instruidos para seguir los métodos siguientes
para controlar a la gente:
1) Usar el soborno monetario y sexual
para obtener el control de hombres ya en altos sitios, en varios niveles de
todos los gobiernos y otros campos de esfuerzo. Una vez que personas
influyentes se habían enamorado de la mentira, los engaños, y las tentaciones
del Illuminati ellos debían ser sostenidos en la esclavitud por el uso de las
formas políticas y otras de chantaje, amenazas de ruina financiera, la
exposición pública, y el daño fiscal, aún la muerte a ellos y los miembros
amados de sus familias.
2) Las facultades de colegios y
universidades debían cultivar a estudiantes que posean la capacidad excepcional
mental que pertenece a familias bien educadas con inclinaciones
internacionales, y recomendarlos para la educación especial en el
internacionalismo. Tal educación debía ser proporcionada concediendo becas
a aquellos seleccionados por el Illuminati.
3) Toda la gente influyente atrapada en
el control del Illuminati, más los estudiantes que sobre todo habían sido
educados y entrenados, debían ser usados como agentes y colocados entre
bastidores de todos los gobiernos como expertos y especialistas. Ellos
aconsejarían que los ejecutivos superiores adoptaran la política que sirva a
los proyectos secretos de la conspiración Illuminati para el mundo y causarán la
destrucción de los gobiernos y religiones.
4) Para obtener el control absoluto de la prensa, en aquel tiempo los únicos medios de comunicación de masas, de modo que todas las noticias y la información pudieran ser inclinadas para hacer a las masas creer que un gobierno único en el mundo, es la única solución para acabar con los problemas (que ellos mismos estarían provocando).
Con todo y eso, el Illuminati y los Rothschilds, no poseían control de la economía mundial, vaya, ni siquiera de un país, un condado o un reino. Su apuesta era a futuro y este no tardó en llegar.
En 1784, Adán Weishaupt publica su orden por la Revolución Francesa para ser comenzada por Maximilien Robespierre (de quien se había hecho amigo) en la forma de libro. Este libro fue escrito por uno de los socios de Weishaupt, Javier Zwack, y enviado por su mensajero de Francfort a París. Sin embargo por el camino, el mensajero es golpeado por un relámpago matándolo. Su cuerpo fue recuperado por unas monjas que lo llevan a su monasterio, ahí le encuentran el documento que detalla el plan y se lo entregan a la policía, quienes a su vez lo entregan a autoridades bávaras. Como consecuencia, el gobierno bávaro ordena a la policía asaltar los alojamientos masónicos de Weishaupt del Magnífico Oriente, y las casas de sus socios más influyentes. Claramente, las autoridades bávaras estaban convencidas que el libro que fue descubierto era una muy verdadera amenaza por el grupo privado de la gente influyente: usar guerras y revoluciones para alcanzar sus fines políticos. La Iglesia y otros gobiernos de Europa fueron advertidos pero no hicieron caso a la amenaza. A la postre, la Revolución Francesa se lleva a cabo bajo la influencia Illuminati. Algunos años después de consumada, el diputado y miembro del Comité de Salud Pública de la Asamblea Nacional, Joseph Cambron recordaba que a partir de 1789 “la gran Revolución golpeó a todo el mundo excepto a los financieros”.
Al año siguiente (1785) Mayer Amschel Rothschild mueve su casa familiar a una casa de cinco pisos en Francfort que él comparte con la familia Schiff.
Para 1790, los Rothschilds acuñaban monedas para algunos gobiernos y como muestra de sus objetivos, Mayer Amschel Rothschild declara: “déjenme publicar y controlar el dinero de una nación y no me preocuparé de quién escribe las leyes”. En 1791, Mayer Amschel propone al gobierno de EU, a través de Alexander Hamilton, su agente en el gabinete de George Washington, el control del dinero nacional a través de un Banco Central. Este banco se establece con el nombre de Primer Banco de los Estados Unidos mediante una Carta de concesión a 20 años. En 1796 Amschel Mayer Rothschild (el primogénito de Mayer Amschel) se casa con Eva Hanau.
En 1798, John Robison (4) de la Universidad de Edinburgo, uno de los principales intelectuales de su tiempo, que en 1783 fue elegido secretario general de la Sociedad Real de Edinburgo, publica un libro titulado: ”Pruebas de una Conspiración Contra Todas las Religiones y los Gobiernos de Europa Desde las Reuniones Secretas de Francmasones, Illuminati y Sociedades de Lectura”. En este libro, Robison dio los detalles del complot Rothschild / Illuminati .
En 1800 Salomon Mayer Rothschild se casa con Caroline Stern. En 1820, abre una sucursal bancaria en Austria. Es en su mansión que comete violación a una de sus sirvientas, una jovencita de 16 años y cuyo hijo, producto de esa violación, vendría a ser a la postre, el padre de Adolfo Hitler. Los detalles de este suceso que marcó el rumbo de la historia, serán expuestos en su oportunidad.
En 1801,
Mayer Amschel se hizo gerente de la corte (Hoffaktor). De 1802 a 1804 realizó su primer préstamo estatal a
la corte de Dinamarca por más de diez millones de
florines. Él mantuvo estrecho contacto con el más importante consejero de
finanzas del príncipe, Carl Buderus.
En 1806, Napolean declara que es su objetivo quitar la autoridad a la casa de Hesse-Cassel y quitarla de la lista de poderes. Al oír esto, el Príncipe Guillermo IX de Hesse-Hanau, escapa de Alemania, va a Dinamarca y confía su fortuna valorada en 3,000,000 de dólares en aquel tiempo a Mayer Amschel Rothschild en depósito. Ese mismo año, Nathan Mayer Rothschild se casa con Hanna Barent Cohen la hija de un comerciante rico de Londres. En 1808 nace su primer hijo, Lionel Nathan de Rothschild.
Durante el gobierno napoleónico de ocupación, Buderus sobornó al general francés Lagrange, para poder asegurar valores en papel de más de quince millones de escudos para el príncipe.
A través de sus buenos contactos con Buderus y el príncipe, quien estuvo en el exilio en Dinamarca de 1806 a 1813, Mayer Amschel forjó una casa bancaria y obtuvo el control total sobre los valores y canjes de deuda del príncipe. Con ayuda de los banqueros Lennap y Lawatz, obtuvo interés en toda Europa y pudo especular con el dinero en su control.
Se vislumbra, de la siguiente anécdota, la relación de poder (el poder detrás del trono): Rothschild trabajaba en su escritorio y le dice al príncipe que entra: "Tráigase usted una silla." Tras unos minutos, el visitante recalca: "¡Soy el príncipe de Thurn und Taxis!" A lo que Rothschild replica: "Muy bien, pues tráigase usted dos sillas.". Rothschild aprendió de Thurn und Taxis el gran valor de la información rápida y precisa y estableció un servicio de correo propio. Tras la derrota de Napoleón en Waterloo, este servicio le reportó una ganancia millonaria en la bolsa de Londres, pues Nathan Rothschild estaba informado de los acontecimientos importantes horas antes que los demás.
En 1808, Nathan Rothschild, fundó el banco N.M. Rothschild & Sons en Londres, que aun sigue operando con éxito. Nathan invirtió el dinero del arriendo de soldados de Guillermo IX en oro de la Compañía Británica de las Indias Orientales; posteriormente, este oro fue necesario para financiar la campaña del Duque de Wellington, aunque no sólo financió a los ingleses, sino también a Napoleón Bonaparte.
1 La Compañía
de Jesús (Societas Jesu, S.J.) es una orden religiosa de la Iglesia Católica,
fundada por San Ignacio de Loyola, junto con San Francisco Javier, Beato Pedro
Fabro, Diego Laynez, Alfonso Salmerón, Nicolás de Bobadilla y Simón Rodrigues
en 1534, en París. Con cerca de 19.000 miembros, sacerdotes, estudiantes y
hermanos, es la mayor orden religiosa masculina católica hoy en día.
2 La Casa
de Estuardo (Stuart, o Stewart, en inglés) fue la dinastía
reinante en Escocia desde 1371 hasta 1603 y desde entonces en conjunto con
Inglaterra e Irlanda.
3 Nació en Ingolstadt, Baviera
el 6 de febrero de 1748. Adam Weishaupt nació en el seno de una familia judía
cuyo padre era el rabino George Weishaupt. A la edad de cinco años quedó
huérfano y fue criado junto con su hermana por su padrino y abuelo Johann Adam
Ickstatt (1702-1776), quien se desempeñaba como director de un colegio jesuíta,
curador de la Universidad de Ingolstadt y miembro del consejo privado. Existen
algunas discrepancias con respecto al parentesco familiar de Weishaupt e
Ickstatt, ya que los apellidos no coinciden, lo cierto es que Ickstatt dejó el
apellido Weishaupt cuando abandono la religión judía.
Fue educado por los jesuitas,
recibiendo una fuerte influencia de la biblioteca de su abuelo, de la que
aprendió parte de la ideología de filósofos franceses. Estudiaba derecho,
economía, política, historia y corrientes ocultas como el gnosticismo y la
filosofía de la reciente masonería. Fuentes de la época aseguran que devoraba
vorazmente cada libro que se encontraba. A pesar de haber recibido una fuerte
influencia jesuita y de vivir en un periodo en el que la Compañía de Jesús fue
perseguida en distintos países, Weishaupt siempre mostró repudio para con ésta.
Algunos escritores argumentan
que en el año de 1771 conoció a un mercader danés llamado Franz Kolmer, quien
lo introdujo en las prácticas mágicas de Egipto y las doctrinas antirreligiosas
de los maniqueos, provocando en la mente del joven Weishaupt un espíritu anarquista
y poco tolerante para con la religión.
En 1772 se convirtió en
catedrático de derecho civil y canónico de la Universidad de Ingolstadt. Muy
rápidamente la concepción liberal de Weishaupt entró en conflicto con los
jesuitas, no obstante, y gracias a la disolución de la Compañía de Jesús por el
Papa Clemente XIV en 1773, Weishaupt se convirtió en decano de la Facultad de
Leyes de la universidad, cargo que había estado en manos de los jesuitas desde
hacia noventa años. Ese mismo año contrajo nupcias sin la aprobación de
Ickstadt.
Entre 1773 y 1775 viajó a
Francia, en donde conoció y desarrollo amistad con María José Marqués de La
Fayette (1757 – 1834) y Maximilien Robespierre (1758 – 1794)
Sus inquietudes ideológicas
le llevaron a ingresar en la masonería, saliendo poco después, decepcionado con
lo que consideraba simples reuniones sociales. Decidió fundar su propia orden
en 1776, basándose en lo que había visto en los jesuitas y la masonería,
llamándola primero como "Los Perfectibilistas" y más tarde como
"Los Iluminados de Baviera" (Illuminati), que es como conocemos a la
orden hoy en día. Weishaupt tomó el sobrenombre de Spartacus, ya que se decía
ser un libertador de la conciencia humana, arrebatando al hombre de los dogmas
y las religiones que lo esclavizaban.
Decepcionado con los pocos
miembros con los que contaba su orden, pidió ayuda a uno de sus adeptos, el
barón protestante Adolph von Knigge (Philón), el cual dio un gran impulso a la
sociedad, llegando a crearse logias en Alemania, Francia, Austria, Italia,
Suiza y Rusia.
El 22 de junio de 1784, las
autoridades políticas y religiosas de Baviera, dieron orden de perseguir a los
miembros de la masonería y los Illuminati. Desbaratada su sociedad, Weishaupt y
su familia huyeron a Gotha, en Sajonia. Fueron perseguidos ya que se descubrió
documentación en la casa de Weishaupt que planteaba dominar a todas las facetas
de la masonería, derrocar a las monarquías de Europa y acabar con la Iglesia
Católica usando los mismos métodos que usaron los jesuitas para defenderla de
los protestantes.
Recibió la ayuda del duque Ernesto II de
Sajonia-Gotha-Altenburg (1745-1804), y vivió en Gotha escribiendo una serie de
obras sobre el iluminismo, incluyendo una historia completa de las persecuciones de los
Illuminati en Baviera (1785), una imagen de las Luces (1786), una disculpa para
los Illuminati (1786), y un sistema mejorado de las Luces (1787). Adam
Weishaupt murió en Gotha, el 18 de noviembre de 1830, renegando de su fe
católica en el lecho de muerte. Le sobrevivieron su esposa, Anna María
Weishaupt (de soltera Sausenhofer), y sus hijos, Nanette, Charlotte, Ernst,
Karl Weishaupt, Eduard y Alfred. Weishaupt fue enterrado junto a su hijo
Wilhelm que le precedió en la muerte en 1802.
No hay comentarios:
Publicar un comentario